El creciente deseo de individualización y la multiplicidad de variantes individuales, así como la incertidumbre sobre el desarrollo de las cifras imponen al sector automovilístico nuevos retos. La clásica producción en banda ya no es aplicable en gran parte y deben encontrarse nuevas opciones de producción. ¿Qué exigencias se establecen para la logística de producción y cómo reaccionar ante ellas? En entrevista con Christian Brauneis, vicepresidente del Business Unit Industry, analizamos estas preguntas y tendencias.
¿Qué retos enfrentan actualmente los fabricantes de automóviles?
Christian Brauneis: La incertidumbre acerca del desarrollo de las unidades de electromotores y motores de combustión interna preocupa al sector. Nadie puede determinar cómo se desarrollará esta tendencia. Lo cierto es que las condiciones se transformarán. Esto quiere decir que la producción clásica en banda que se instala para un largo período de tiempo ya no podrá funcionar en el futuro en el sentido de la rentabilidad. Así también, el creciente deseo de individualización y la multiplicidad de variantes que ello implica imponen nuevos retos. Los fabricantes de automóviles del futuro deberán organizar sus líneas de producción en forma muy dinámica. Existe la exigencia de fabricar muchos tipos distintos con una línea.
Las tendencias de la industria automovilística otorgan un enfoque completamente diferente a los conceptos de secuencia, disponibilidad, exactitud de secuencia, estrategia cero errores y flexibilidad. A pesar del menor grado de previsibilidad, los sistemas deben estar en condiciones de adaptarse.
¿Qué apariencia tendrían las líneas de producción dinámicas y flexibles?
Christian Brauneis: Algunos fabricantes ya trabajan con nuevos modelos de producción. Allí no existe una asignación fija de tipos de automóviles ni estaciones, como en la producción clásica en banda. Con ayuda de robots de transporte autoguiados, las estaciones, las celdas y carroserías se reúnen en un lugar donde se realizan las actividades. Ello permite alcanzar un alto grado de flexibilidad. Con productos cuyo ciclo de vida es fácilmente calculable y cuyo diseño permanecerá invariable, la línea de producción clásica tiene sentido. Pero donde existen grandes modificaciones o las unidades son menores, como en el sector Premium, una inversión en una línea de producción a largo plazo ya no será rentable para algunos tipos.
Tanta flexibilidad implica naturalmente también un gran desafío para la logística. ¿Qué respaldo ofrece KNAPP a sus clientes en este sector?
Christian Brauneis: La industria automovilística es la reina de las disciplinas en el sentido de la cobertura y el control de la cadena de suministro. En caso necesario, la entrega al minuto exacto de piezas en el lugar de montaje exige un concepto logístico altamente desarrollado. Este proceso ya se inicia donde el proveedor de piezas y se extiende hasta la producción de automóviles. Si falta una pieza, el automóvil registra un error. Los índices de producción y la frecuencia de impulsos, sin embargo, tienen que conservarse a alto nivel. Esto requiere una disponibilidad extremadamente alta, rendimiento y una estricta secuencia hasta el lugar de montaje, además del sistema 24/7. Todo ello establece altas exigencias a la logística, la técnica y también al sector del servicio al cliente. Estas crecientes tendencias exigen cada vez mayor flexibilidad de los sistemas logísticos y la capacidad de asimilar modificaciones en el programa de producción.
El sistema de almacenamiento automático OSR Shuttle™ Evo puede adaptarse en todo momento a distintas exigencias de rendimiento y volumen ofreciendo flexibilidad. También en el sector de los vehículos autoguiados, nuestra larga experiencia brinda el respaldo necesario. Nuestros robots móviles Open Shuttle son la herramienta ideal para el transporte de mercancía flexible. Asimismo, ofrecemos nuestra experiencia en soluciones de trenes logísticos. Con ayuda de sistemas de reconocimiento de imágenes de ivii, filial de KNAPP, cubrimos el tema de control de calidad en el área de montaje.
¿Qué tecnologías ha desarrollado KNAPP especialmente para la industria automovilística? ¿Se ha realizado ya algún proyecto?
Christian Brauneis: Puesto que la logística no termina en el almacén, sino en el lugar de montaje, donde se requiere la pieza individual, hemos desarrollado para proyectos anteriores una carga completamente automatizada de tren logístico. Asimismo, continuamos perfeccionando un software especial para las exigencias del sector automovilístico. La estricta necesidad de secuenciación exige un software sofisticado. La importancia radica no solo en el almacenaje y desalmacenaje y la preparación de piezas, sino también en la secuencia precisa. Además, el sector automovilístico impone normas específicas técnicas y de maquinaria que se deben considerar. Actualmente hemos concluido nuestros primeros proyectos en este sector con Pankl Racing Systems, MSG y Magna Steyr. Los siguientes están en procesamiento.
¿Qué características tiene la producción inteligente desde el punto de vista de KNAPP?
Christian Brauneis: Nuestra visión es la línea de producción 100% flexible. Ya no existe asignación fija de un lugar de montaje a un ciclo. Los materiales y carroserías ya no se movilizan a lo largo de una línea, sino en forma separada en una superficie. Actualmente, la línea predetermina el ritmo. Existe una asignación estricta que determina una acción en cada lugar a un tiempo exacto. Probablemente sea distinto en el futuro y la logística determine la producción, pues la decisión de construir lo más efectivo depende de estados de stock actuales o de la distribución en la superficie y ya no de la línea. En muchos casos, tal vez la línea ya no existirá en la forma actual. En principio, se trata de la ruptura de rígidas y estrictas convenciones normalizadas. Con ello, la producción podría tener características completamente distintas en el lapso de tres horas.
Ejemplo de una solución de este tipo:
El elemento primordial es un almacén de lanzaderas altamente flexible con piezas almacenadas. Luego, una gran cantidad de vehículos de transporte autónomos para el automóvil, el producto y también para las piezas. Con estos es posible construir, dentro de una superficie, muchas cosas distintas. Directamente en el lugar de montaje, el sistema, con ayuda de sistemas intuitivos, indica al operario cómo debe realizar exactamente la actividad. El concepto de cero errores se materializa garantizándose así un control de calidad al 100% durante el montaje. Con ayuda de estos sistemas es posible también realizar varias actividades en el lugar de montaje.
Además de las tendencias mencionadas existe un nuevo concepto de las energías renovables y la protección del medioambiente. ¿Cómo influyen estos factores en la industria automovilística?
Christian Brauneis: Viajar se convertirá algún día en un servicio. Especialmente en el área urbana esto es previsible. No todos poseerán un auto propio, se usarán el sistema carsharing, medios de transporte autónomos o similares. Sin embargo, los índices de producción probablemente no descenderán debido al crecimiento general de la población y a los países donde la movilidad aún no está fuertemente desarrollada. Los mercados de crecimiento ya no se encuentran en Europa, sino en continentes como Asia y África, donde se exportan los autos producidos. En Europa o en Estados Unidos existirán alternativas, sobre todo en las ciudades. Si los automóviles electrónicos serán el futuro, es incierto. La tendencia se aleja del motor de combustión interna, pero aún no se vislumbra lo que lo sustituirá. Tal vez los automóviles electrónicos a batería son solo un paso intermedio hasta el desarrollo de otros vehículos. Debido a la producción y explotación de tierras poco comunes, los automóviles electrónicos tampoco representan una alternativa «verde». Tal vez se impongan los automóviles impulsados por hidrógeno u otros. El futuro es excitante.
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